Ante la impotencia, el estrés o un estado bajo de ánimo, el comer puede resultar gratificante momentáneamente.
Probablemente muchos de nosotros lo hemos hecho alguna vez, y no significa que tengamos un trastorno alimentario Sigue leyendo
Ante la impotencia, el estrés o un estado bajo de ánimo, el comer puede resultar gratificante momentáneamente.
Probablemente muchos de nosotros lo hemos hecho alguna vez, y no significa que tengamos un trastorno alimentario Sigue leyendo