La fibromialgia (FM) es un problema crónico de etiología desconocida de momento. Los pacientes afectados presentan dolor musculoesquelético crónico y generalizado, no articular, una reducción del umbral del dolor y múltiples puntos con gran sensibilidad dolorosa a la presión y con una localización característica.
El dolor no puede ser explicado por la presencia de trastornos degenerativos o inflamatorios. Aparece también en la mayoría de casos una clínica asociada como mala calidad del sueño, rigidez matutina, cansancio, depresión, ansiedad, cefalea, hábito intestinal irregular, dolor abdominal difuso, parestesias y sensación subjetiva de hinchazón, por lo que la calidad de vida de estos pacientes está muy afectada.
Es un problema muy frecuente, tiene una prevalencia del 2,4% en la población general. Ocupa el 15% de las consultas de reumatología y del 5 al 10% de las consultas de atención primaria.
Es más frecuente en mujeres con una relación hombre mujer de 1 a 7. La prevalencia mayor es a la edad de 30-50 años aunque puede aparecer en cualquier etapa de la vida.
La OMS incorporó el diagnóstico específico de FM en la décima revisión de la clasificación de enfermedades (ICD-10) que entró en vigor el 1 de enero de 1993.
La Fibromialgia produce consecuencias en la vida no sólo de los pacientes que la presentan si no también en las personas con las que se relacionan. Los pacientes refieren una repercusión importante en cuanto a su capacidad física, actividad intelectual, estado emocional, relaciones personales, carrera profesional y salud mental, de manera que requiere que el paciente desarrolle múltiples estrategias de afrontamiento.
El tratamiento es sintomático al desconocerse la etiología (causa que la provoca). Hay múltiples estudios en su búsqueda pero de momento ninguno es concluyente, uno de los últimos publicados es el que la relaciona con la alteración de la temperatura corporal.
Los objetivos del tratamiento son aliviar el dolor, mejorar la calidad de vida, mantener o restablecer el equilibrio emocional, mejorar la calidad del sueño, la capacidad física, la astenia y los problemas asociados y así conseguir una recuperación funcional que se mantenga el máximo tiempo que sea posible.
La mayoría de los pacientes continuarán con dolor y cansancio, según las conclusiones de varios estudios de seguimiento, a los 14 años. El 70% de los pacientes aseguran que pueden mantener su capacidad de trabajo y reconoce que la FM interfiere poco en su vida, y un 30% se siente incapacitado para trabajar.
Hay una serie de factores psicológicos que se asocian a un pronóstico mejor como son: el sentimiento de control del dolor, no sentirse incapacitado, no interpretar el dolor como un signo de daño, la realización de ejercicio físico y de tareas rutinarias o rítmicas.
El coste económico socio sanitario es también muy elevado. Son pacientes que presentan un mayor gasto en cuanto a consumo de fármacos y de recursos sanitarios, así como bajas laborales largas y recurrentes; refieren necesitar cambios de puesto de trabajo o reducciones de jornadas laborales, pero tienen dificultades para conseguir incapacidades debido al gran componente de subjetividad que presenta la enfermedad y la falta de pruebas diagnósticas para demostrarla.
¡Pero si la padeces no dudes de que entre todos podremos con ella!
Enlaces de interés: Ministerio de Sanidad, Pub Med, Sociedad Española de Reumatología.
Casi estoy diagnosticada, y tengo todos los síntomas, pronto me dirán que tengo, estoy empezando a intentar vivir con ésto pero es muy duro cuando tienes 44 años un trabajo fijo a punto de perder por no poder seguir adelante y lo peor de todo que nadie te entiende ni los medicos ni nada, solo confiar en que Dios haga justici. Gracias por compartir sobre ello doctora
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Yo no soy creyente, pero sí que confío en la ciencia, y estoy convencida de que al final darán con las causas de la FM y asi podrán tratarla como sea necesario.
Mucho ánimo y paciencia.
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Muy buena entrada, 🙂
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¡Gracias!
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Soy enferma de fibromialgia, llevo 10 años padeciendola y e aprendido mucho sobre la enfermeda, lo que me ayuda mucho es que practico yoga y taichi chuan, hoy por hoy estoy bien controlada, reciban un abrazo muy fuerte con algodones. Ivonne lechuga.
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El ejercicio moderado es fundamental y una de las bases del tratamiento de la FM.
¡Gracias por tu comentario!
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Gracias por el post, nadie puede tener una idea de lo que yo quisiera estar en este 70% que todavía puede trabajar, pero desafortunadamente no es mi caso. Es una enfermedad que te consume lentamente, como yo le digo, tengo al fantasma de la muerte a mi lado continuamente, pero éste no me matará, aunque a veces pienso que ojalá lo hubiese hecho hace años.
Ya leí tu PM y te dejé otro PM para ti. Besos
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No te desanimes, en ésta como en otras muchas enfermedades es estado de ánimo es crucial, así que ya sabes…arriba!!!
Entre todos podremos con ella.
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¡Excelente post! Enhorabuena por él, y gracias por ayudar a la difusión de una enfermedad tan desconocida y poco entendida como prevalente. Ojalá los profesionales de las diferentes especialidades consigamos una labor más integradora y de consenso, y podamos seguir profundizando en el correcto diagnóstico y tratamiento para nuestros pacientes. ¡Un saludo!
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¡Gracias por tu comentario!
Seguro que entre todos lo conseguiremos.
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Gracias María José, conocía la existencia de la enfermedad pero he aprendido cosas nuevas. Entre todos podremos con ella, ¡¡claro que sí¡¡
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¡Gracias Pilar por tu comentario y por compartirlo en Twitter!
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